Los problemas de comportamiento provocados por ansiedades o fobias subyacentes son cada vez más frecuentes en los perros. No importa lo que intentemos; parece que nada funciona, y nos sentimos fatal al ver a nuestro perro en apuros. Pero no estamos solos. En los últimos años, los veterinarios han venido prescribiendo medicamentos para ayudar a combatir estos problemas. Uno de los más populares en estos casos es la trazodona (nombres comerciales: Desyrel, Oleptro).
Índice de contenidos
- Aplicaciones frecuentes
- ¿Cómo se administra Trazodona al perro?
- Seguridad y efectos secundarios
- Posibles efectos secundarios
- Interacciones con otros medicamentos
- Almacenamiento
- ¿Es la trazodona adecuada para mi perro?
- Referencias
¿Qué es la trazodona?
La trazodona es un antagonista/inhibidor de la recaptación de la serotonina, es decir, un “SARI”. Los SARI son medicamentos antidepresivos que se utilizan para abordar y tratar los trastornos de ansiedad o las fobias en los perros. Los ruidos fuertes, la ansiedad por separación, las visitas al veterinario y los viajes son algunas de las alteraciones que se engloban bajo este paraguas.
Ámbitos generales de aplicación
- Fobias al ruido (fuegos artificiales, tormentas eléctricas, etc.)
- Visitas al veterinario
- Estancias en residencias caninas
- Ansiedad por separación
- Viajes
- Personas nuevas
- Entorno nuevo
Las situaciones mencionadas anteriormente originan sentimientos de gran incertidumbre. Esto puede provocar estrés y ansiedad en tu perro. Puede que los SARI, como la trazodona, no sean lo primero a lo que recurra tu veterinario en términos de tratamiento para el diagnóstico inicial, pero estos medicamentos han resultado eficaces tanto en perros como en gatos que no parecen responder a los tratamientos habituales. Si has probado un tratamiento tras otro sin que tu perro muestre signos de alivio, un SARI puede ser la respuesta que estabas buscando.
¿Cómo se administra la trazodona al perro?
En general, el veterinario receta los medicamentos como la trazodona para una indicación diferente a la de la ficha técnica. Esto significa que la dosis y la frecuencia con la que se administra la trazodona a los perros pueden diferir significativamente de lo que se recomienda en el prospecto. Por ello, es especialmente importante que consultes con tu veterinario y sigas cuidadosamente sus instrucciones.
La trazodona en perros se administra por vía oral en forma de comprimidos. Puede administrarse con o sin alimentos. Ahora bien, para algunos propietarios de perros, las palabras “comprimido” o “cápsula” pueden tener ciertas connotaciones negativas. No es ningún secreto que algunos perros no aceptan tomar cápsulas ni comprimidos de ningún tipo. Nuestros queridos amigos, que suelen comer de todo, se vuelven delicados de repente (como si supieran que les vamos a dar una medicina). Obviamente, esto puede suponer otro obstáculo a la hora de intentar que tu perro reciba tratamiento. Aunque seguro que tienes tus propios métodos, esconderlo en su golosina favorita o envolverlo en un trozo de queso parece funcionar para algunos. Lamentablemente, en la actualidad, la trazodona sólo está disponible en forma de comprimidos.
Seguridad y efectos secundarios
Los efectos secundarios de la trazodona apenas están documentados en los perros, ya que es un fármaco de acción muy rápida, lo que significa que no permanece en su organismo durante mucho tiempo.
Posibles efectos secundarios
- Pupilas dilatadas
- Sedación
- Vómitos
- Atragantamiento
- Pérdida de control muscular
- Letargo
- Aumento de la ansiedad
- Aumento del apetito
- Agresividad
Aunque la lista mencionada parece larga, puedes estar tranquilo. La mayoría de los efectos secundarios en los perros son muy leves o casi inexistentes. Sin embargo, es importante estar informado para poder reconocerlos y afrontarlos si se producen.
No se recomienda el uso de trazodona en mascotas con antecedentes de hipersensibilidad a otros SARI. Este tipo de medicamentos sólo debe utilizarse con precaución en animales con enfermedades cardíacas y renales graves. Y como con la mayoría de los medicamentos: Si tu perra está preñada o en periodo de lactancia, habla con tu veterinario para conocer las posibles complicaciones que su uso podría acarrear.
Interacciones con otros medicamentos
Existen algunas interacciones entre la trazodona y otros medicamentos que debes conocer. Los analgésicos antiinflamatorios (AINE) como la aspirina, los tranquilizantes y algunos otros antidepresivos (ISRS) son ejemplos de algunos medicamentos que deben utilizarse con precaución cuando se toma trazodona al mismo tiempo. En general, le recomendamos que le comentes a tu veterinario todos los medicamentos y suplementos que utilizas actualmente, ya sean prescritos o de venta libre, tan pronto como consideres la posibilidad de tomar un medicamento adicional.
Almacenamiento
En el caso de la trazodona, la conservación presenta una serie de particularidades. Se recomienda almacenar el medicamento en un recipiente hermético a temperaturas que oscilen entre los 25 y los 30 °C. También se recomienda mantener el medicamento protegido de la luz solar.
¿Es la trazodona adecuada para su perro?
Si tu perro tiene problemas con alguna de las alteraciones comentadas anteriormente, desde los fuegos artificiales hasta la ansiedad por separación, la trazodona podría serte útil. Aunque su uso se sigue considerando “no habitual”, esto es algo que está cambiando rápidamente. Si tu perro no ha respondido a otras formas de tratamiento, y sus alteraciones no han mejorado, habla con tu veterinario sobre la posibilidad de administrarle un SARI, como la trazodona.